Tarta Alaska

Para el merengue:

1. Coloca en un bol las claras de huevo y el azúcar. Con unas varillas eléctricas comienza a montar ambos ingredientes hasta conseguir una textura uniforme. Juega con la velocidad hasta conseguir una consistencia firme y un aspecto brillante. 

Para el bizcocho

1. Precalienta el horno a 180º. Mientras tanto, coloca papel para hornear en el molde. Para evitar que el bizcocho se te pegue, humedece el papel en agua tibia previamente.
2. En un bol mezcla los ingredientes secos: harina, cacao y sal. Reserva.
3. En otro bol añade los huevos, el azúcar y empieza a batir con las varillas, a ser posible utiliza unas eléctricas. Continua hasta conseguir que la mezcla quede sin grumos.
4. Seguidamente añade los ingredientes secos que habías reservado y vuelve a mezclar. 
5. Vierte la mezcla sobre el molde. Para evitar las burbujas de aire que hayan podido aparecer da unos suaves golpes sobre la superficie. Hornea durante 30-35 minutos. Para saber si el bizcocho está listo puedes insertar una brocheta en el centro y revisar que salga limpia.
6. Una vez pasado el tiempo de horneado retira el bizcocho del horno y deja enfriar en el molde durante 10 minutos. 
7. Corta el bizcocho transversalmente en 2/3 planchas.

Para el montaje de la Tarta Alaska:

1. Saca los helados del congelador y déjalo unos minutos a temperatura ambiente.
2. Extiende la miel con una cuchara sobre cada lámina de bizcocho y añade los helados al gusto.
3. Introduce la tarta en el congelador durante 4 horas aproximadamente. 
4. Pasado el tiempo le añadimos el merengue.

Para la decoración de la Tarta

1. Cubre el pastel con el merengue con ayuda de una espátula curvada o una cuchara procurando añadir una mayor proporción sobre la parte superior.
2. Con un soplete de cocina funde el merengue colocándolo a unos 6-8 cm de la tarta hasta conseguir el tono deseado.
3. Pata terminar, coloca de nuevo la Tarta Alaska en el congelador durante unos 15 minutos para conseguir que quede firme.