Trazas, ¿qué son y dónde se encuentran?

Seguro que en el etiquetado de muchos productos has visto la frase “Puede contener trazas de cacahuetes, trigo, huevo, etc.” ¿Te has preguntado alguna vez qué significan las trazas?

Trazas alimentarias

Si consultáramos la definición de la Real Academia Española de la Lengua, que exista una traza quiere decir que hay un vestigio, una prueba, en definitiva, una pequeña presencia. Pero en la realidad esto no es así.

La frase “Puede contener trazas de” indica que el alimento puede contener cantidades muy pequeñas de algún componente concreto, pero no como un ingrediente, sino porque en la misma planta de producción del alimento que consumimos se manipula algún otro producto que contiene este alimento o ingrediente que incluimos como traza.

Alérgenos alimentarios

El porqué de esta declaración nutricional es sencilla a la vez que compleja. ¿Para qué declarar que puede contener un alérgeno cuando en realidad es casi improbable que lo contenga?

La respuesta está precisamente ahí, porque se trata de un alérgeno. Desde hace unos años es obligatorio indicar la presencia de alérgenos en los alimentos destinados al consumo tanto a la venta como para consumir en bares, cafeterías y restaurantes. El motivo de esto es la reacción que pueden desencadenar en personas alérgicas alimentos que contienen estos alérgenos, especialmente los que cursan con reacciones más severas como el huevo, el marisco o los frutos secos.

En resumen, la declaración de trazas es una información útil, segura y fiable que nos aporta una tranquilidad sobre el entorno donde ha estado el alimento que vamos a llevarnos a la boca.