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Tipos de pasta y formas de prepararla

La pasta es una maravilla culinaria que nos transporta a las soleadas tierras italianas con cada bocado. Si eres un amante de la gastronomía, seguro que ya sabes que hay muchísimos tipos de pasta. Lo que quizás no sabías es que la forma de la pasta tiene un propósito, y no, no es solo estética. Dependiendo del tipo de salsa o ingredientes que utilices, algunas pastas son más adecuadas que otras para garantizar que cada bocado sea una explosión de sabor. ¿quieres descubrir todos los tipos de pasta y consejos sobre cómo prepararlas para que siempre queden perfectas? Entonces estás en el lugar adecuado.

Los diferentes tipos de pasta

Antes de sumergirnos en los detalles, es importante entender que la pasta se puede clasificar en tres grandes categorías: pasta larga, pasta corta y pasta rellena. Cada una tiene su encanto y un uso particular.

Tipos de pasta larga

La pasta larga es probablemente la más icónica. Desde los spaghetti hasta los fettuccine, estos tipos de pasta son ideales para acompañar salsas ligeras, ya que su forma permite que los sabores se distribuyan de manera uniforme. Aquí te dejo algunos ejemplos populares:

Spaghetti: ¡El rey de las pastas largas! El spaghetti es universalmente conocido y amado. Se trata de una pasta cilíndrica y delgada que va bien con casi cualquier tipo de salsa, aunque tradicionalmente se sirve con salsa de tomate o pesto. ¿Un consejo para prepararla? Cocina el spaghetti al dente (es decir, un poquito firme) y luego mezcla directamente con la salsa en la sartén para que absorba todo el sabor. Prueba nuestros espaguetis con queso y pimienta, una receta sencilla pero deliciosa.
Fettuccine: Un poco más ancha que el spaghetti, el fettuccine es una pasta plana que se suele servir con salsas más espesas y cremosas, como la salsa Alfredo. ¡Nada como un buen plato de fettuccine con salsa de crema y champiñones para una cena reconfortante!
Linguine: El linguine es similar al fettuccine, pero más delgado. Su nombre significa "pequeñas lenguas", y es perfecto para platos de mariscos, como nuestros Tallarines a la marinera, especialmente aquellos que llevan almejas o camarones, ya que retiene bien los jugos de estos ingredientes.

Tipos de Pasta Corta

La pasta corta es versátil y se usa comúnmente en platos horneados o ensaladas de pasta. Gracias a sus diversas formas, captura las salsas y trozos de ingredientes en cada curva. Aquí tienes algunos ejemplos:

Penne: Este tipo de pasta corta en forma de tubo con extremos cortados en diagonal es perfecto para salsas densas y cremosas. Su textura rugosa (en su versión rigate) permite que la salsa se adhiera mejor. También es ideal para preparar platos al horno o unos deliciosos macarrones "Garganelli" con salmón.
Fusilli: Conocido por su forma en espiral, el fusilli es fantástico para retener salsas más ligeras o incluso para ensaladas de pasta frías. Las curvas de la pasta capturan pedacitos de vegetales, carnes y aderezos, lo que lo convierte en una opción ideal para un plato veraniego refrescante.
Farfalle: Esta pasta en forma de pajarita no solo es bonita, sino que también es muy funcional. Es perfecta para platos fríos, como ensaladas de pasta con atún, o con salsas ligeras a base de aceite de oliva y ajo. A los niños les encanta por su forma divertida, lo que la convierte en una excelente opción para platos familiares.

Tipos de Pasta Rellena

Los tipos de pasta rellena son un verdadero lujo. En este caso, el relleno es tan importante como la pasta en sí. Este tipo de pasta se suele rellenar con ingredientes como queso ricotta, carne, espinacas o incluso calabaza. ¡Vamos a ver algunos de los más populares!

Ravioli: El ravioli es posiblemente el más conocido dentro de las pastas rellenas. Estos pequeños cuadrados de pasta están rellenos de todo tipo de delicias, desde ricotta y espinacas hasta carne molida. Se sirven comúnmente con salsas ligeras de mantequilla y salvia, o con salsas de tomate frescas. En bofrost* puedes encontrar nuestros ravioli Ricotta y Espinacas, perfectos para cualquier ocasión.
Tortelini: Los tortelini son como pequeños anillos de pasta rellenos de queso, carne o una mezcla de ambos. Se sirven a menudo en caldos o sopas, lo que los convierte en una comida reconfortante en los días más fríos. También pueden servirse con salsas cremosas o al pesto.
Cannelloni: A diferencia del ravioli o los tortellini, el cannelloni es un tubo grande que se rellena con ingredientes como carne, ricotta y espinacas, y luego se hornea con salsa de tomate o bechamel. Es un plato sustancioso y perfecto para ocasiones especiales. Si eres fan de este tipo de pasta, no te puedes perder nuestros Canelones Supreme.

Consejos para Cocinar la Pasta Perfecta

Ahora que conoces los diferentes tipos de pasta, ¡es hora de aprender a prepararlos de la mejor manera posible!

La sal en el agua es crucial: Al cocinar la pasta, asegúrate de agregar suficiente sal al agua. Esto no solo sazona la pasta, sino que también ayuda a mejorar la textura.
No sobrecocines la pasta: La pasta debe cocinarse al dente, lo que significa que debe estar firme al morder. Esto es especialmente importante si vas a mezclarla con una salsa caliente o si la vas a hornear después, ya que se seguirá cocinando un poco más.
Guarda un poco del agua de la cocción: Cuando cocines pasta, guarda un vaso del agua de cocción antes de escurrirla. Este agua, llena de almidón, es perfecta para añadir a las salsas y darles una consistencia más suave y cremosa.
Mezcla la pasta directamente con la salsa: Para que la pasta absorba bien los sabores de la salsa, es mejor mezclarla con la salsa en la sartén en lugar de servirlas por separado.

Como ves, el mundo de la pasta es increíblemente variado, y cada tipo tiene su propio lugar en la cocina. Y si no tienes mucho tiempo para cocinar pero quieres disfrutar de los mejores tipos de pasta igualmente, no olvides que en bofrost* puedes encontrar una amplia variedad de platos preparados y productos de La Trattoria.