¡No te oxides! Dale color a tu alimentación

Los antioxidantes como “solución” al proceso oxidativo 

Una dieta equilibrada compuesta por alimentos antioxidantes, con alto predominio de frutas y verduras (que son los alimentos que mayor contenido de componentes anticorrosivos), hará que nuestras actividad diaria se vea favorecida mejorando nuestro día a día sintiéndonos mejor.

Hay miles de moléculas antioxidantes y que si nombráramos aquí no acabaríamos nunca el post. Además, seguramente no todo el mundo tiene acceso a todos los productos que las componen, ya sea por situación geográfica, situación económica o por simples gustos personales. Por lo tanto, podríamos decir que cada vegetal, cada fruta tiene las suyas y cada una de ellas hace una función de protección distinta. Por lo tanto, mientras más tengamos mucho mejor para nuestro organismo, ya que estará más protegido.

Os dejamos un listado de algunos de los antioxidantes de procedencia vegetal para que puedas dar color a tus platos y llenarlos de juventud:

• Vitamina C: Mandarinas, naranjas, fresas,
• Vitamina E: Aguacate, aceites vegetales.
• Caroteno: zanahoria, calabaza, espinacas.
• Quercetina: cebolla, brócoli, cebollino
• Alicina: Ajo
• Luteínas y zeaxantina: Brócoli, coles de Bruselas, judías verdes.
• Antocianinas: arándnanos, moras, manzana roja.
• Luteolina: apio, tomillo, pimiento verde.
• Hidroxitiroso: Aceite de oliva virgen extra (AVOE)
• Selenio: Frutos secos, pipas, cereales integrales

Crea tu plato lleno de color y sabor

Las frutas y verduras con colores más llamativos (rojo, morado, naranja, verde oscuro…) son los que mayor antioxidantes tienen por lo que estos colores no deben faltar en tus platos nunca.

Lo ideal sería incluir alguno de estos alimentos en nuestros menús diarios para de esta forma componer todos los colores del arco iris, un arco iris que aparte de dar luz a nuestros platos, da luz a nuestras vidas a través de una alimentación rica, saludable y llena de beneficios para la salud.

Otra de las cuestiones importante para que nuestra dieta sea óptima y consigamos “frenar ese envejecimiento” es evitar en la medida de lo posible el consumo de todos aquellos alimentos y hábitos que contribuyan a causar oxidación, como por ejemplo: los dulces, las bebidas con alcohol, refrescos azucarados, alimentos procesados como embutidos… y por supuesto no fumar.

Para conseguir todo esto sólo debemos ser conscientes de la importancia de una dieta equilibrada y llena de alimentos antioxidantes, cuidarse nunca había sido tan fácil.